La belleza del baile y el movimiento

Llegó el verano y con él las vacaciones, la alegría, las fiestas, la música y el baile o el dance. En la mayoría de los pueblos primitivos el baile, a través de las danzas rituales, ha servido para celebrar ceremonias y expresar todo tipo de sentimientos. Siempre ha ocupado un relevante protagonismo en rituales de fertilidad, fiestas religiosas, guerreras, de adoración o invocación, alumbramientos y otros muchos acontecimientos sociales.

EL BAILE COMO TERAPIA

A lo largo de la historia, el hombre ha sabido aprovechar los magníficos beneficios que otorga el movimiento. Un inmenso caudal de propiedades que en la actualidad vuelve a utilizarse con fines terapéuticos. Por lo general estas terapias de expresión corporal, como la biodanza, movimiento rítmico (TMR), rolfing, danza africana, eutonía, euritmia o el método Feldenkrais, se fundamentan en la investigación sobre la comunicación no verbal, el análisis del movimiento y la psicología del desarrollo humano. A través de ellas se consigue que interactúen el cuerpo y la mente para liberar emociones y sentimientos ocultos anclados en el subconsciente.

LA EXPRESIÓN EN EL MOVIMIENTO Y EL BAILE

El movimiento posibilita la expresión emocional de sentimientos que no se pueden expresar con palabras. Prestigiosos profesionales afirman que practicando asiduamente estas psicoterapias la creatividad y la expresividad aumenta, facilitando el desarrollo psico-social, cognitivo y afectivo del individuo. Se ha demostrado su eficacia en el tratamiento de niños con dificultades de integración y problemas de aprendizaje, y en adultos con baja auto-estima, ya que ayuda a la auto-aceptación. Contribuyen a mejorar desórdenes emocionales, estrés, ansiedad y superación de adicciones.Aumentan el potencial creativo y expresivo, y son una excelente herramienta de auto-conocimiento y crecimiento personal.

LOS BENEFICIOS DE BAILAR

Con el movimiento, progresivamente se fortalecen los músculos, se alcanza mayor elasticidad, e incluso, se pueden mejorar y corregir hábitos posturales. Se suavizan las formas del cuerpo y se adoptan movimientos más naturales, mejorando el aspecto de la imagen personal.

Como consecuencia, acrecientan la autoestima, afianzan la confianza en uno mismo y dejan que la belleza natural resurja. Para sentirse bien y encontrase atractivo necesitamos aceptarnos y respetarnos. Cuando estamos a gusto con nuestro aspecto externo somos más felices, estamos más radiantes y mejoramos la conexión con el mundo externo que nos rodea. Además, si nos sentimos bien físicamente se refleja de manera positiva en la mente y en el espíritu, lo que se traduce en una mejor calidad de vida.

En Alice in Beautyland piensan en tu belleza natural; piensan en tu salud; piensan en TÍ. Por ello, quieren que, además de bailar felizmente, utilices cosméticos exentos de químicos. Quieren mimarte con sus tesoros de belleza al ritmo que nos marcan las notas musicales de la naturaleza. Por ello, y tras largas investigaciones, elaboran cuidadosamente su exclusiva alta cosmética natural. Descubre Alice in Beautyland, y… ¡Baila al ritmo de la naturaleza!