Maripi Gadet, directora de Green Press Comunication, un buró de comunicación principalmente dedicado a las empresas ecológicas, nos resume el actual estado de la cuestión en el universo ecológico de la Comunitat Valenciana. La información es de primera mano, porque Maripi reside en esta Comunidad.
La Comunitat Valenciana se encuentra en estos momentos situada como la tercera autonomía con mayor peso y potencial en el sector biológico dentro del territorio español. Sus especiales características climatológicas y de terreno permiten la posibilidad de cultivar una gran diversidad de productos, como son: aromáticas, cítricos, nísperos, huerta, arroz, chirimoya, aguacate, mango, guayaba y almendras, entre otros frutos destacados. Además, existe un producto casi específico de la Comunidad Valenciana, la chufa ecológica, un fruto de gran calidad que ha ya ha sido premiado en varias ocasiones por sus excelentes propiedades.
La producción es mayoritariamente minifundista, lo que permite que los agricultores sean pequeños productores que cuidan con gran esmero y profesionalidad sus cultivos, aunque también su dependencia de las ayudas y compensaciones es mucho mayor. Su esfuerzo personal es muy loable y su producción suele contar con una alta calidad, aunque la circunstancia de ser “pequeños” condiciona notablemente su rentabilidad. Si las ayudas disminuyen se convierten en los grandes damnificados de las políticas agrarias de la Unión Europea, especialmente los productores de secano. Es un complicado problema al que se enfrentan, que además conlleva la inevitable pérdida de población en los pequeños municipios.
La Comunitat Valenciana está muy comprometida con la producción ecológica, existiendo una gran actividad a lo largo de sus tres provincias, lo que permite que existan en el mercado un gran número de productos con sello ecológico de esta comunidad. Los productores están luchando con todas sus energías y talento para obtener una producción de altísima calidad, lo que está permitiendo que el mercado esté aumentado, aunque sea de manera lenta en relación con el gran esfuerzo de todo el sector. Hay que destacar el espíritu de los agricultores valencianos dedicados a la producción biológica, quienes se muestran con gran profesionalidad y actividad.
Los primeros años del nuevo siglo fueron buenos, aunque ahora el sector está pasando por unos momentos de incertidumbre. Se podría afirmar que en estos momentos los operadores van a un ritmo diferente al de la Administración. La sensación, viendo las estadísticas, es que la producción se ha ralentizado ligeramente. Sin embargo, por otro lado, la industria no ha dejado de crecer y cada vez existe un mayor interés y un mayor consumo. El objetivo básico de los productores es conseguir un modelo rentable y autosuficiente, que resulte sostenible. Pero en la actualidad las compensaciones o ayudas por cultivo resultan claves para lograrlo, sobre todo en terrenos de secano.
Se están buscando nuevos mercados directos para aumentar paulatinamente las redes de distribución, lo que permitiría que puedan acceder al producto un mayor número de consumidores, eliminándose intermediarios, tiendas, grandes cadenas, etc. Un mercado directo al consumidor para abaratar costos y rentabilizar la producción. También se están abriendo puertas al mercado de la exportación, principalmente a Alemania, Austria, Dinamarca y Suiza, los países europeos con mayor número de consumidores de productos “bio”. En EE.UU. la demanda principal es el vino y el aceite. En España, y en estos momentos de crisis, todavía no existe una filosofía de vida lo suficientemente importante como para que todo el producto se quede en nuestro país.
No obstante, el productor de esta comunidad es innovador. Existen destacados ejemplos, como es la empresa Bio-Darma, quien ha sido galardonada en múltiples ocasiones por la calidad de sus productos, elaborados artesanalmente con frutos autóctonos y tradicionales, como el algarrobo alicantino. Todo un ejemplo que permite augurar que, a pesar de las dificultades, el sector ecológico en la Comunidad Valenciana sigue luchando con tesón y talento.
Maripi Gadet
Directora de Green Press Comunicación